Será la vida y sus vueltas locas las que hicieron que un buen amigo justo escribiera un post sobre la muerte, que harías si supieras que tienes un mes de vida?
La pregunta me estallo en vacío en especial porque diez minutos mas y no la podría haber respondido. Sin embargo esto me hizo plantarme muchas cosas, muchas cosas se asomaron a mi como una rueda que aplastó y evadió.
Es cierto que haría si mañana me avisaran que tengo un mes de vida?
Quizá abrazaría a mi madre a mis hermanos y les diría que lo son toda mas que mi vida, que la vida no sería vida si no estuviese con ellos, que prefiero todo antes que el olvido y la rutina carcoman nuestra unión, nuestra familia, que agradezco a Dios que me los haya puesto en el camino y que todo lo que siento es más grande que yo misma.
Quizá también abrazaría a mis amigos, les diría que hicieron de mi vida la más grande historia, que le confirieron mas sentido a mi vida, que la ayudaron a despegar en sus sueños, que agradezco la paciencia que le confirieron a mis locuras y que por sobre todas las cosas confiaron en mi, a veces mucho mas que lo que yo podría hacer.
Quizá besaría locamente a las personas de las que me retenido de hacer, quizá porque creí que no correspondían a mis sentimientos, y es que aun nadie lo ha hecho, pero quizá esas sean tan solo ideas mías. Los abrazaría y les diría la verdad de todo lo sentido, esperando quizá egoístamente que me correspondan pero ni aunque la muerte exista a mi vera se puede cambiar las cosas del cariño.
Quizá cantaría, quizá lloraría más pero buscaría mas de esas sonrisas que me hacen sentir tan especial, quizá leería mas de lo normal, quizá saltaría como una niña en un trampolin y entraría a todos los juegos de niños a vivir la vida desde esa perspectiva, quizá abrazaría tanto a mis abuelos a mis primos a mis tíos y les pediría por su paz y la mía que sus problemas los dejen atrás y comiencen de nuevo, la vida es tan corta. Les agradecería tanto el haberme soportado tantos años...
Quizá viajaría, quisiera observar, como el anhelo más grande de mi vida las pirámides, el partenón griego, la gran muralla china, petra, chavín de huantar, kuelap, la puerta del sol, y volver a recordar la emoción de tocar nuevamente machu picchu de elevarme hasta el cielo sintiendo que milenios y milenios atrás personas como yo se cuestionaron ante su ídolo o dios por la brevedad del vivir y la grandeza tan contraria a esto.
Pero es que es tan poco un solo mes de vida, que se parece a la vida misma, nunca alcanza para desbordar en todos nuestros sueños, para hacer felices a todos y a nosotros mismos, solo nos queda esperanza, es lo último que se pierde y se debe perder, negarnos para volar, vivirlo para volar.
1 comentario:
Es tan corta la vida y tan breve. Pero creo que debemos hacer todo eso de igual forma. Porque no existen miedos que valgan.
d.
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